Esta guapísima mujercita es mi sobrina María.
Estas navidades le ha dado tanta batalla a la guitarra que terminó así:
Figúrense con que ganas le da a la guitarra y con que fuerza.
Hay reparaciones que parecen sencillas y no lo son en absoluto y otras que parecen difíciles, en las que se podría pensar en desechar el instrumento y sin embargo tienen fácil arreglo.
La Pega de la cabeza es inapreciable. |
Este fue uno de esos casos, sorprendentemente la guitarra vuelve a cobrar vida y a sonar en las manos de esta pequeña artista, espero que por mucho tiempo.